La literatura del siglo XIX se posiciona como un monumento cultural que encapsula la esencia de una época marcada por profundos cambios. Desde la Revolución Industrial hasta las revoluciones políticas y sociales, este período fue testigo de una explosión creativa que dejó un legado perdurable en la historia de la humanidad.
En este artículo, nos sumergiremos en las entrañas de las letras del siglo XIX, explorando con mayor profundidad sus características, géneros, escritores y obras emblemáticas que definieron una era.
Para entender la literatura del Siglo XIX, hay que conocer el contexto en el que se forja. La sociedad europea comenzó el siglo con las Revoluciones Burguesas que, gracias al Imperialismo, se extenderían por todo el mundo, provocando que los países conquistados se levanten en armas y se independicen.
En este sentido, la literatura del siglo de oro navegó entre la lucha política que llevaron a cabo liberales y conservadores, siendo los primeros quienes tuvieron ventaja la mayor parte del tiempo.
Ya en la segunda mitad del siglo, con la industrialización en ciernes, los intelectuales de la época volcaron el temor de la sociedad ante los cambios que se estaban produciendo con textos ambientados en lugares desconocidos.
Si queremos hacer referencia a las características, hay que detenernos a analizar los 5 grandes movimientos que surgieron en esta época.
Surge como una de las principales corrientes de la literatura de la época dorada. Surge una nueva figura dentro de la literatura, el “yo creador” colocando al autor en el tema sobre el que tratar, abordando una gran cantidad de sentimientos, emociones, pensamientos, imaginación, etc.
Las principales características del romanticismo literario son:
El individualismo: el autor lo usará para hablar de manera subjetiva sobre su mundo, centrando el tema sobre el que hablar, dejando en un segundo plano el mundo exterior.
Fantasía e imaginación: los románticos de la época sentían fascinación por la mente y la imaginación. La fantasía y los poderes sobrenaturales estaban muy presentes en la literatura del S. XIX.
Defensa de la libertad: la libertad de creación, pensamiento y sentimiento son los temas principales que buscan los románticos.
Nacionalismo: la defensa a ultranza de la libertad y el individualismo romántico tuvo una gran influencia en la sociedad.
La poesía romántica: se trata del género favorito de los románticos. De ella, extraen sus emociones y su pasión por la vida.
Con la llegada de la segunda mitad del siglo la tendencia cambia. Se comienza a dejar de lado el romanticismo y el sentimentalismo para dejar paso a temas más terrenales y moderados.
Las características del realismo literario incluyen:
Objetividad: el autor no quiere hablar de su vida, quiere hablar de todo en general sin verse influenciado por los sentimientos u opiniones sesgadas. La objetividad nace para describir la vida tal y como es.
Narrador omnisciente: en el romanticismo, el narrador contaba la historia en primera persona, ahora, con el realismo, el narrador se desliga de la historia para, de esta forma, poder describir todo lo que ve de forma objetiva.
Ausencia de fantasía: los autores del realismo dejaron atrás la fantasía del romanticismo. Se centraron en narrar historias que pasaban en el día a día en las ciudades europeas.
El naturalismo es una corriente literaria con influencias del realismo, considerando al autor como un científico capaz de experimentar.
La novela pasa a ser su laboratorio de pruebas para conocer la sociedad, entenderla y entender el comportamiento humano.
Las características más destacadas del naturalismo son:
Determinismo social: el ser humano viene condicionado por factores sociales como la genética, la clase social o el género.
Objetividad: esta corriente quiere conocer en profundidad la realidad apostando por un discurso muy alejado de los sentimientos.
Ciencias: los naturalistas emplean el método científico para desarrollar su obra.
La literatura del siglo XIX reflejó las preocupaciones y conflictos de una sociedad en constante cambio.
Desde la lucha de clases hasta la injusticia social, pasando por la explotación laboral y la discriminación de género, los escritores de esta época se convirtieron en testigos y críticos de su tiempo, utilizando la pluma como un arma para denunciar las injusticias y promover el cambio social.
Uno de los aspectos más destacados de la literatura del siglo XIX fue el énfasis en la psicología de los personajes. Los escritores exploraron las motivaciones, los conflictos internos y las complejidades emocionales de manera más profunda que nunca antes, brindando a los lectores una visión íntima de la mente humana y sus contradicciones.
Dentro de la literatura del Siglo XIX, hubo 3 grandes géneros que acapararon todas las miradas.
La novela experimentó un florecimiento sin precedentes durante el Siglo XIX, convirtiéndose en el género dominante de la época.
Desde las obras sociales de Charles Dickens hasta las novelas psicológicas deFiódor Dostoyevski, pasando por los romances de Jane Austen, la novela abarcó una amplia gama de temas y estilos, reflejando la diversidad y complejidad de la experiencia humana.
Aunque eclipsada por la novela, la poesía también floreció en el siglo XIX. Poetas como William Wordsworth, Emily Dickinson y Charles Baudelaire exploraron nuevas formas de expresión poética, rompiendo con las convenciones establecidas y explorando temas que iban desde la naturaleza y el amor hasta la alienación y la melancolía.
Aunque menos prominente que la novela y la poesía, el teatro también dejó su huella en el siglo XIX.
Autores como Henrik Ibsen, Anton Chejov y Oscar Wilde produjeron obras que desafiaron las convenciones sociales y exploraron temas tabú como el adulterio, la homosexualidad y la emancipación de la mujer, sentando las bases para el teatro moderno.
La edad dorada de las letras cuenta con numerosas obras importantes. En Buscalibre, queremos destacar aquellas obras que consideramos imprescindibles en tu librería particular:
Jane Austen y “Orgullo y Prejuicio”: Austen es mundialmente reconocida por su aguda observación de la sociedad inglesa y sus novelas de comedias de costumbres. “Orgullo y Prejuicio” Es una de sus obras más conocidas, que sigue la historia de Elizabeth Bennet y su relación con el enigmático Sr. Darcy.
Charles Dickens y “Grandes Esperanzas”: Dickens es célebre por sus retratos de la vida en la Inglaterra victoriana. "Grandes Esperanzas" es una de sus obras más aclamadas, que narra la historia de Pip, un niño huérfano que sueña con convertirse en un caballero.
Fiódor Dostoyevski y "Los Hermanos Karamázov": Dostoyevski es considerado uno de los más grandes novelistas de todos los tiempos. "Los Hermanos Karamázov" es una epopeya psicológica que explora temas como la moralidad, la religión y el libre albedrío a través de las vidas entrelazadas de una familia rusa.
Lev Tolstoi y “Ana Karénina”: Tolstoi está considerado como uno de los mejores autores del S. XIX. “Ana Kanérinana” es una obra que explora la sociedad de la Rusia de la época a través de tramas personales,
La literatura del siglo XIX es un tesoro cultural que sigue resonando en el siglo XXI. Con su riqueza temática, profundidad psicológica y estilo inigualable, las obras de este período continúan fascinando y conmoviendo a lectores de todas las edades en todo el mundo.
Sumérgete en las páginas de estos clásicos y descubre por qué la literatura del siglo XIX sigue siendo relevante hoy en día.
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